En un contexto laboral tradicional, se concibe el lugar de trabajo como una ubicación física, donde los empleados trabajan en oficinas y se unen para reuniones en un espacio físico compartido. Así, el sector educativo no es una excepción a esta manera de concebir los entornos de trabajo: Hablamos de colegios, institutos, academias, universidades, escuelas de negocio…
Afortunadamente, en todas estas instituciones académicas, la forma de concebir un entorno de trabajo está cambiando y el objetivo actual es facilitar la colaboración entre el equipo docente, personal administrativo y por supuesto con los propios alumnos. Adicionalmente, los nuevos entornos de trabajo están permitiendo la deslocalización: poder colaborar e interactuar en cualquier momento y desde cualquier lugar.
No cabe duda de que el uso y la proliferación de dispositivos móviles, así como la facilidad de gestionar su conectividad y utilización, resultan fundamentales para mejorar las capacidades laborales y educativas, elevando la productividad y la eficiencia. A día de hoy, son varios ya los escenarios de uso posibles:
Estas son tan sólo algunas de las acciones que se puede llegar a hacer en un entorno de trabajo colaborativo.
Herramientas integradas para facilitar el uso, el aprendizaje y la administración
Siendo más concretos, estamos hablando de trabajar con aplicaciones y herramientas de Microsoft como Outlook, Word, Excel, PowerPoint, SharePoint, OneDrive y Microsoft Teams, tanto en ordenadores como en las plataformas móviles más populares (iOS y Android). Toda la comunidad educativa puede crear, chatear, compartir y presentar, desde el dispositivo que elija, e incluso acceder a los sitios de la intranet de la organización mientras está en el centro educativo, en casa o de viaje. Así, la ubicación física deja de importar.
La forma de comunicarnos y de educar está cambiando rápidamente, pero para lograrlo es preciso contar con tecnologías que faciliten los entornos de trabajo modernos. En este sentido, Microsoft 365 es la apuesta de Microsoft y de Seidor para la comunidad educativa. Podríamos describirlo como la suma del paquete Office 365 con el sistema operativo gestionado, más aplicaciones de colaboración, movilidad y seguridad integradas.
La seguridad en cualquier dispositivo: un aspecto fundamental
Y lo mejor de todo es que cuentan con un altísimo nivel de protección para que las aplicaciones y los datos permanezcan totalmente seguros. Especialmente cuando se trata de información muy sensible, como la vinculada a menores de edad en colegios, institutos y academias.
En Seidor somos conscientes de que adoptar una nueva cultura de trabajo también significa encontrar nuevas formas de administrar y asegurar la infraestructura de productividad al tiempo que minimizar los costes y el impacto para los usuarios.
Y ahí precisamente es donde Microsoft 365 funciona a la perfección sin importar el entorno: Mac, PC o las plataformas móviles iOS y Android. De hecho, está diseñado para simplificar la administración y proporcionar un conjunto de capacidades de seguridad inteligente para ayudar a satisfacer tanto las necesidades actuales como futuras.
Por lo tanto, Microsoft 365 está preparado para abordar las amenazas de seguridad en rápida evolución y cada vez más especializadas, así como las nuevas regulaciones críticas de cumplimiento, incluido el Reglamento General de Protección de Datos (GDPR) de la UE.
Por todo lo anterior, recomendamos aprovechar las capacidades integradas de seguridad y cumplimiento incluidas en Microsoft 365 para la gestión de los puestos de trabajo actuales.
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Viri Macías - Responsable de Desarrollo de Negocio | MBU
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