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Ayer se celebró el Día Internacional de Concienciación sobre el Ruido, con el propósito de promover a nivel internacional el cuidado del ambiente acústico, la conservación de la audición y la concienciación sobre las molestias y daños que generan los ruidos. En España está promovido por la SEA (Sociedad Española de Acústica).

La contaminación acústica, causada principalmente por la actividad humana, es el exceso de sonido o vibraciones que altera las condiciones del ambiente en una determinada zona e implica molestia, riesgo o daño para las personas o el medio ambiente. El límite máximo del nivel de ruido aceptado por la OMS es de 65 decibelios, y se ve superado ampliamente en determinadas zonas como grandes ciudades, zonas industriales, vías de transporte, etc.

La exposición a niveles elevados niveles de ruido, tanto puntuales como prolongados en el tiempo, tienen efectos nocivos sobre la salud de las personas, que pueden llegar a ser permanentes. Las principales consecuencias son físicas y psicológicas (pérdida de audición, problemas cardiovasculares, dolor de cabeza, estrés, alteraciones del sueño, pérdida de atención), pero también puede implicar otro tipo de efectos, como aislamiento, fracaso escolar o conductas agresivas. Todas ellas tienen efecto económico negativo en la sociedad.

¿Qué se puede hacer para disminuir la contaminación acústica?

Tanto las administraciones públicas como las empresas y los particulares pueden y deben adoptar medidas para reducir los niveles de ruido que causan:

Uno de los principales causantes de la contaminación acústica es el tráfico rodado. Actualmente se pueden tomar medidas que minimicen su impacto, como la utilización de asfaltos fonoabsorbentes, el uso de vehículos eléctricos silenciosos, la disminución de la velocidad, el soterramiento de vías de gran tráfico a su paso por centros urbanos, etc.Los núcleos urbanos y las grandes infraestructuras viarias, ferroviarias y aeroportuarias deben contar con un Mapa Estratégico de Ruido para evaluar la exposición de la población al ruido y adoptar las medidas correctoras necesarias para minimizarlo.Las viviendas y locales deben contar con correcto aislamiento estructural que impida que el ruido entre o salga.

 

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