Consultoría & Consultores

Esta edición viene cargada de los siguientes artículos:

La lección aprendida de este verano es el editorial de Jorge Salinas que subtitula “El talento tiene poco que ver con el saber” y en el que comparte como ha ido construyendo su consideración sobre la naturaleza del talento. El último elemento que ha descubierto y que “da consistencia a la salsa” es la pasión. Casi al final te propone un desafío… del que un personaje muy conocido diría “un desafío, muy desafío, mucho desafío”. ¿Te atreves a aceptarlo?

Los dos campos de juego del mentor efectivo: contextos conversacionales en mentoring de Miguel Labrador contiene una de las respuestas principales a tu pregunta o inquietud acerca de ¿por qué es tan poco efectivo mi programa de mentoring? o ¿cómo podría incrementar su efectividad? No nos parece nada exagerado afirmar que su lectura es muy recomendable para los mentores y, mucho más aún, para los responsables de diseñar estos programas.

¿Para qué ser coach, si no voy a ser coach? es la reflexión de Iván Yglesias-Palomar acerca del propósito que moviliza a algunas personas a capacitarse en esta disciplina y de los beneficios que promueve en ellas que van mucho más allá del ejercicio de una profesión. Es frecuente escuchar entre las personas que han experimentado ese viaje la palabra transformación o como concluye Iván, “un modo de vida”.

Confianza y mentoring es el artículo de Jaime Bacás que señala a la confianza como factor crítico para el éxito de la relación de mentoring, identificando los tres vectores principales que la construyen y robustecen. La pregunta para los diseñadores de los programas de mentoring empresarial es ¿cómo garantiza mi diseño el afloramiento de la confianza entre mentee y mentor? y otra más difícil ¿cómo lo mido? para los que creen que sólo se puede mejorar lo que se puede medir… y sólo se puede medir lo que se puede observar.

Desde Atesora Group confiamos en que tus vacaciones hayan sido placenteras y te damos la bienvenida en el retorno a las ocupaciones habituales que has elegido. Por eso te invitamos a disfrutar con ellas.

Recuerda que disfrutar o sufrir por las cosas que pasan en tu vida es una elección que sólo depende de la interpretación que tu hagas de ellas.

Y si no lo tienes claro… habla con un coach, ya.

Fuente: Atesora Group

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