Consultoría & Consultores

La madurez de las tecnologías de Robotic Process Automation (RPA) ha provocado un cambio en el grado de atención de las empresas hacia este tipo de tecnologías. Dicho cambio es evidente. Solo hay que comparar la creciente presencia de este tema en diferentes foros respecto a solo dos o tres años atrás. La multitud de casos de éxito que se conocen en la actualidad ha provocado que hoy en día gran cantidad de empresas hayan situado Robotics como una de las iniciativas clave de crecimiento y que el interés por tener más información acerca de sus capacidades haya crecido exponencialmente.

Antes de nada, aclaremos a que se refiere el término Robotic Process Automation. No se trata en ningún caso de robots físicos/humanoides, sino de software instalado en los ordenadores capaces de replicar todas las acciones que las personas ejecutamos en un ordenador. Se les puede enseñar a leer una pantalla, copiar información, mover el ratón o clicar donde sea necesario…. Esto permite automatizar gran cantidad de tareas administrativas en multitud de entornos y procesos de negocio, descargando a personas de trabajo repetitivo y de poco valor.

La gran mayoría de compañías ya son conscientes de las ventajas competitivas y oportunidades que aportan estas nuevas tecnologías y el mercado se está moviendo rápido. Tan rápido que, como nos suele ocurrir a menudo, en muchos casos existe ya interés por implantar tecnologías que aporten capacidades cognitivas e inteligencia artificial. El avance en dichos campos es exponencial y estará claramente conectado con RPA para aumentar las capacidades de realizar tareas menos repetitivas y que requieran cierta capacidad de decisión. Pero son tecnologías menos maduras. Hoy en día, en el entorno administrativo-financiero, la solución más estable y que aporta un rápido retorno de inversión -entre muchos otros beneficios- es Robotic Process Automation.

A modo de conclusión quiero destacar los puntos clave que, en mi opinión, deberíamos tener en cuenta en relación a estas tecnologías. Por una parte, es importante pensar en grande pero empezar por algo pequeño, seleccionando bien el proceso a automatizar y la herramienta a implantar. En segundo lugar, hay que tener en cuenta que hoy en día es posible automatizar procesos en cuestión de semanas. Finalmente, aún más importante, los robots son fantásticos para realizar gran multitud de tareas pero no olvidemos que el factor clave y diferencial de las compañías son las personas, ya que ellas son quienes seguirán aportando el valor añadido diferencial.

Andrés Panedas, gerente del área de Robotics