Tecnología e innovación disruptivas para el sector de la moda.

La industria española necesita transformarse y adaptarse al momento tecnológico actual.

No hay duda que las nuevas tecnologías van a ser integradas en todas las industrias sin excepción.

La capacidad de adaptación a la digitalización difiere en función del sector industrial. Algunos, con un ADN más tecnológico, han integrado de una forma más fluida la transformación digital; sin embargo, en otros sectores, como puede ser el caso de la moda, la adaptación tecnológica a la nueva era digital no ha hecho más que empezar…

Los retos del sector de la moda en España pasan por entrar de lleno en la omnicanalidad. La digitalización debe ofrecer una experiencia de marca única a los clientes en cualquier mercado en el que se encuentre operando.

Optimizar las operaciones de la cadena de valor, de manera que permitan un crecimiento sostenible y una rentabilidad creciente.

Vincular la diferenciación a las marcas, diseños y conceptos de negocio. En un mercado saturado de marcas de moda diferenciase es clave. Crecer de manera sostenida no es posible sin profundizar en la diferenciación frente a la competencia.

Consolidar la internacionalización de las marcas e incrementarlas a través de la diversificación de mercados, aumentando la presencia en mercados importantes para la moda, más allá de la Unión Europea.

Innovar, innovar e innovar. La continua innovación en materiales, en diseño de productos, en marcas, en canales de comercialización, permitirán al sector de la moda española proyectarse internacionalmente con un reconocimiento a su labor innovadora.

Potenciar a las personas en su formación y desarrollo en áreas clave del sector de la moda, como son el diseño, la recuperación de los oficios artesanos, la gestión de canales y de operaciones o el emprendimiento.

Sin talento no se podrá seguir creciendo en un entorno de fuerte competencia internacional como es el sector de la moda.