No hay discusión. El Consenso Económico del segundo trimestre de 2019, que elabora PwC a partir de la opinión de un panel de más de 400 economistas, directivos y empresarios españoles, refleja la creciente preocupación de nuestros expertos por la situación del comercio mundial.
Nuestros especialistas creen que la guerra comercial entre Estados Unidos y China es el primer factor de desestabilización global.
Curiosamente, sin embargo, la preocupación sobre el impacto del proteccionismo en la economía global todavía no se ha traducido, a juicio de los encuestados, en un deterioro de la situación actual ni tampoco de las expectativas de crecimiento, que se mantienen en niveles parecidos, o incluso algo mejores, que en la anterior encuesta.
Cuando se les pregunta por el estado de la economía mundial a día de hoy, una mayoría significativa (un 54,2%, frente al 50% del trimestre anterior) cree que sigue siendo buena, y a la hora de interpretar la situación de Estados Unidos y China, que son los principales concernidos por las tensiones proteccionistas, se observa incluso una cierta mejoría. Solo Europa empeora su valoración, aunque de forma ligera.
Si alargamos la vista a seis meses y un año, tampoco se aprecia un empeoramiento de las previsiones de crecimiento. A nivel global, se consolida la corriente de opinión de que la economía seguirá igual, e incluso hay un cierto aumento del número de respuestas de que irá a mejor. En el caso de la Eurozona y de China, la evolución es parecida y la situación en Estados Unidos solo se resiente en las expectativas para junio de 2020, cuando una mayoría de los participantes (un 53,3%) considera que la economía empeorará. Estos resultados sugieren que las tensiones proteccionistas, aun siendo graves, pueden ser reconducidas y evitar que acaben dañando seriamente la economía internacional.