Tras comentar cuales fueron los primeros pasos de los planificadores de recursos empresariales y que pueden aportar a nuestro negocio en el primer post, vamos a continuar con los campos de actuación y funcionalidades habituales de un ERP tradicional y que debemos pedirle a un software de gestión actual, todo ello nos ayudará a saber cómo elegir un ERP.
¿Cuáles son sus funciones y campos de actuación?
Puede que ya sepas que es un ERP y qué beneficios aporta a tu negocio, pero ¿dónde actúa nuestro software de gestión? Este te dará control absoluto sobre todos los procesos del negocio, algunas de sus funciones y campos de actuación son:
· Gestión de la cadena de suministro: compras y adquisiciones, control de inventario, entrada de pedidos, planificación, inspección de mercancías, procesamiento de incidencias…
· Gestión de relaciones con el cliente: servicio al cliente, gestión de oportunidades, precisión de ventas, generación de leads, marketing y e-marketing. A menudo estas funciones se potencian vinculando nuestro ERP a un CRM.
· Gestión financiera: procesos financieros básicos incluyendo contabilidad, caja, activos, cuentas por pagar y por cobrar, procesos avanzados como contabilidad de costes, analítica empresarial y previsión de flujos de caja.
· Producción: disponga de todos los procesos de fabricación en un sistema de información; órdenes de producción con propuesta del MPR y MPS. Disponga de información de capacidades y asignaciones.
· Gestión de proyectos: tiempos y gestión de gastos, cálculo de costes, facturación y supervisión de tareas…
· Business Intelligence: análisis de negocio, informes de gestión, negocios y planificación de recursos…
¿Qué debemos pedirle a un sistema de gestión empresarial actual?
En los anteriores apartados hemos repasado la historia del ERP, ventajas de uso, campos de actuación, funcionalidad… pero el mundo de los planificadores de recursos empresariales es grande y nuestras necesidades avanzan al mismo ritmo que la tecnología. Todo lo que hemos hablado hasta ahora es importante, pero para saber cómo elegir un ERP necesitamos ir un paso más allá, debemos exigir a nuestro ERP características acorde a un entorno en constante movimiento. Un ERP debería permitirnos vincular nuestras herramientas de uso diario como Word, Excel, Outlook, o Skype; llevar siempre encima nuestro sistema de gestión, para ello debe disponer de aplicaciones para smartphones y tablets que impulsen la movilidad y flexibilidad de nuestro negocio; facilitarnos un retorno de información acerca de nuestra actividad, reporting a través de tablas dinámicas, Business Intelligence (Power BI), Power Pivot o Power View; que ofrezca alternativas de despliegue, debemos poder elegir donde ubicar nuestro ERP, ya sea en nuestros servidores, o en la nube; y que permita definir si queremos nuestro ERP en modalidad Saas (Software as a service) o a través de licencia.
Ahora que ya sabes que es y cómo elegir un ERP, si buscas un software de gestión empresarial que aúne las funciones y ventajas de un ERP tradicional junto a las de un software moderno, actualizado y con el respaldo de una de las comunidades más grandes del mundo de la tecnología, Microsoft Dynamics NAV (Navision) es la respuesta. ¡Confía en el ERP líder en España!
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