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Mucho podríamos discutir sobre el ROI de la formación y si aquellas empresas que invierten en el desarrollo de sus empleados tienen mejores resultados económicos. Aún así, la discusión resultaría estéril, por la dificultad de medir los resultados en muchos puestos y por el intento de realizar esta medición pensando solo en el corto plazo.

Si pensamos a medio y largo plazo, no podemos dudar de la importancia de la formación. Allí dónde un profesional no es capaz de lograr algo, seguramente le falta algún tipo de conocimiento.

Por muchas veces que se diga en los foros de recursos humanos, la inversión en formación en la empresa es de vital importancia, no solo pensando en los trabajadores, sino pensando en los resultados empresariales.

Si esto es así, ¿Por qué las empresas no destinan suficientes recursos económicos a la formación y en muchos casos no dejan de considerarla como un gasto no productivo o una molestia? ¿Por qué tantos directivos consideran que se dispersa al trabajador de conseguir la necesaria productividad cuando la organización está destinando su tiempo a que este trabajador se forme?

A menudo la respuesta a esta cuestión tiene dos principales ejes. En primer lugar, se buscar la mejora de la eficacia y la eficiencia a corto plazo, y resulta difícil de demostrar el impacto inmediato de la formación. En segundo lugar, y mucho más importante, no se cree en las personas. Se considera que los individuos solo pueden hacer el trabajo que están desarrollando en el presente y no se desea que desarrollen otro en el futuro. Ni siquiera se piensa en que puedan enriquecer su trabajo actual con múltiples matices que mejoren su impacto en la organización.

Solo cuando empresarios y directivos empiecen a pensar de verdad que una adecuada formación redunda positivamente en la productividad y en el rendimiento de los empleados y ayuda a retener el talento, empezaremos una nueva etapa en la gestión de las organizaciones dónde la partida de formación forme parte de los flujos de inversión en capital humano. Muy lejos de como se entiende la contabilidad actualmente, ¿verdad?

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Formación