La presencia de la mujer en el sector tecnológico
Es popularmente conocido que la presencia femenina en el sector tecnológico es inferior a la masculina. De hecho, en España, solamente el 19,8% de las posiciones digitales son ocupadas por mujeres según el estudio Competencias transformadoras para la igualdad de género en la sociedad y la economía digital del Observatorio de Igualdad y Empleo.
Sin embargo, un reciente estudio de Kaspersky declara que un 47% de las profesionales españolas que desarrollan su carrera profesional en el sector TIC ha percibido que los niveles de igualdad de género han mejorado en su organización los últimos años. Y el 62% considera que fueron valoradas sus habilidades y experiencia por encima de cuestiones de género durante el proceso de incorporación a su primer empleo.
Aunque el sesgo de género en la industria tecnológica es un hecho, las empresas cada vez están más a favor de que sus equipos sean diversos.
Antiguamente el rol de las mujeres en el ámbito tecnológico era prácticamente invisible, no obstante, varias de ellas han tenido un papel fundamental en el desarrollo de tecnología clave y merecen una mención.
Ada Lovelace, nacida en 1815, matemática y escritora británica es considerada la madre de la programación ya que escribió el primer algoritmo de la Historia que fue procesado por una máquina. Una década más tarde, el Departamento de Estado de Estados Unidos crearía un lenguaje de programación con su nombre ADA, como reconocimiento a su trabajo.
Grace Murray Hopper, científica computacional y militar neoyorquina fue pionera en el mundo de las ciencias de la computación y la primera programadora en utilizar el Mark I. Así mismo, creó el Lenguaje Común Orientado a Negocios (COBOL), el primer lenguaje de programación de alto nivel de ordenador y propició métodos de validación entre las décadas del 50 y 60.
Mary Kenneth Keller, religiosa católica originaria de Ohio, fue la primera mujer en Estados Unidos doctorada en ciencias de la computación en 1965. Co-desarrolladora de BASIC (Beginner’s All-purpose Symbolic Instruction Code), el primer lenguaje informático que llevó la programación al público general y cuyo diseño facilitó la programación de ordenadores.
Hedy Lamarr, actriz de profesión, pasó a la historia por inventar y patentar la primera versión del espectro ensanchado que permitiría las comunicaciones inalámbricas de larga distancia. Por ello, se la acredita precursora del Wifi y el Bluetooth.
Jude Milhon, famosa hacker y defensora de los derechos personales en Internet. Acuñó el vocablo ciberpunk y destacó por formar parte de la asociación Computer Professionals for Social Responsibility.
La industria de la tecnología avanza y el sector está en auge. Hay una alta demanda de vacantes en España para personal especializado en diferentes tecnologías que los profesionales en activo no son capaces de cubrir.
La gran cantidad de puestos vacantes, las condiciones laborales más beneficiosas y el salario medio superior al resto (concretamente del 22,1%) hace que se convierta en un sector con grandes oportunidades, y para las mujeres, tener acceso a estas oportunidades se convierte en una mejora en el nivel económico y crecimiento profesional.
El origen de la brecha de género la encontramos en la educación y más concretamente en las carreras STEM (ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas), en la que las mujeres tienen menos presencia. Es por ello, que el reto está en educar a edad temprana a la población femenina sobre las opciones de carrera y aprendizaje existentes. Solo así, se incrementará su interés para formarse y desarrollarse profesionalmente en este sector.
En la actualidad, solamente el 16% de los altos cargos de las empresas tecnológicas están ocupados por mujeres y un 10% en posiciones ejecutivas, según el estudio “Cuantificando la Brecha de Género” de Entelo. Aun así, este porcentaje ha ido creciendo en los últimos años.
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